El poder del autocuidado en la perimenopausia

May 14, 2025Por Lorena García

LG

La perimenopausia es un proceso único para cada mujer, no hay una sola forma de vivirla ni una única solución que funcione para todas. Mientras algunas mujeres experimentan síntomas leves, otras atraviesan cambios físicos y emocionales que pueden afectar a su calidad de vida. En esta etapa, más que nunca, es fundamental aprender a escuchar las señales de nuestro cuerpo y elegir un camino de autocuidado que se adapte a nuestras necesidades.

¿Qué es la perimenopausia?

La perimenopausia es el período de transición que precede a la menopausia. Puede comenzar en torno a los 40 años y, dependiendo de cada persona, suele durar entre 4 y 10 años. Se caracteriza por fluctuaciones hormonales, especialmente en los niveles de estrógenos y progesterona, lo que provoca una serie de síntomas físicos y emocionales.

La menopausia, es el momento en el que se cumplen 12 meses consecutivos sin menstruación. La edad media para la menopausia está alrededor de los 50 años. Se determina menopausia precoz cuando llega antes de los 40 años, y temprana cuando sucede antes de los 45.

Durante la perimenopausia se producen fluctuaciones en los niveles de hormonas femeninas, lo que puede generar ciclos menstruales irregulares y síntomas que pueden afectar a nuestro bienestar.

Cada mujer tiene su propio ritmo, su propia historia y sus propias necesidades, la clave está en prestar atención a nuestro cuerpo con estrategias de bienestar personalizadas. No se trata de seguir fórmulas universales, sino de encontrar lo que te hace sentir bien, en equilibrio y en armonía con esta nueva etapa.

Aprende a escuchar las señales del cuerpo

El cuerpo es un reflejo de lo que sucede en nuestro interior, cuando algo no está en equilibrio, nos lo hace saber a través de señales como fatiga, insomnio, cambios de humor, dolores de cabeza, problemas digestivos o sofocos. Muchas veces, el ritmo acelerado de la vida nos hace ignorar estas señales, minimizarlas o normalizarlas, sin embargo, escucharlas es el primer paso para cuidarnos mejor.

Durante la perimenopausia, los cambios hormonales pueden generar síntomas muy diversos, desde ansiedad y sensibilidad emocional hasta molestias físicas. En lugar de luchar contra ellos o verlos como un problema, podemos abordarlos como mensajes que el cuerpo nos envía para que prestemos más atención a nuestras necesidades.

Algunas preguntas que pueden ayudarte a conectar con tu cuerpo en esta etapa son:

 • ¿Cómo me siento cuando me despierto? ¿Descanso lo suficiente?

 • ¿Qué alimentos me hacen sentir bien y cuáles me generan molestias?

 • ¿Cómo está mi energía a lo largo del día?

 • ¿Qué actividades me generan bienestar y cuáles me agotan?

 • ¿Cómo respondo al estrés y qué herramientas me ayudan a gestionarlo mejor?

Responderte con honestidad te dará pistas sobre lo que necesitas modificar o reforzar en tu rutina de autocuidado.

El autocuidado: una decisión consciente y personalizada

Cuidarse no es un lujo ni una moda, es una necesidad. Sin embargo, el autocuidado no es igual para todas, lo que funciona para una mujer puede no ser lo ideal para otra, la clave es encontrar prácticas que te nutran física, mental y emocionalmente.

En la perimenopausia, es importante priorizar alimentos ricos en nutrientes que apoyen el equilibrio hormonal y la salud general. Pero más allá de las recomendaciones generales, lo más importante es que te sientas bien con lo que comes y que observes cómo responde tu cuerpo.

El ejercicio es un gran aliado en esta etapa, pero no todas las mujeres tienen la misma relación con la actividad física, algunas disfrutan del yoga o el pilates y otras prefieren entrenamientos de fuerza o caminatas al aire libre.

El descanso en esta etapa es fundamental para nuestro bienestar. Durante la perimenopausia, el insomnio y los despertares nocturnos son comunes debido a los cambios hormonales. Algunas estrategias que pueden ayudarte son crear una rutina relajante antes de dormir, reducir el consumo de cafeína por la tarde o  mantener horarios regulares de sueño para sincronizar el ritmo biológico.

Además, el estrés puede intensificar muchos de los síntomas de la perimenopausia, aprender a manejarlo nos puede ayudar a afrontarlo mejor. Puedes probar con mindufulness o meditación, paseos al aire libre, técnicas de relajación, masajes, leer, pintar, escuchar música...

La información sobre la perimenopausia es valiosa, pero recuerda que no todas las recomendaciones serán adecuadas para ti. Escucha a tu cuerpo, prueba distintos enfoques y quédate con lo que realmente te haga sentir bien.

Si sientes que necesitas apoyo extra, no dudes en buscar ayuda profesional, un especialista en salud hormonal femenina puede orientarte y acompañarte en este proceso y ofrecerte estrategias personalizadas.

Conclusión

La perimenopausia es una etapa de transformación que invita a escuchar más profundamente al cuerpo y a priorizar el bienestar de manera consciente. No hay una sola forma de atravesarla, ni una única solución universal. Cada mujer debe descubrir qué prácticas le aportan equilibrio y bienestar, desde la alimentación y el ejercicio hasta el descanso y el manejo del estrés.

El autocuidado en esta etapa es una inversión en calidad de vida. Aprender a escuchar las señales del cuerpo y elegir lo que realmente te nutre, te permitirá vivir la perimenopausia con mayor bienestar, sintiéndote en armonía contigo misma.